Un hombre caminando

Caminaba por Viamonte.Vestía un sobretodo claro, ni marrón ni beige.Tenía sus manos en los bolsillos, y un paso firme, no por eso acelerado.Su cara era distinta a todas las caras que había visto. Sus rasgos eran ásperos,rústicos y sin embargo había una cierta armonía.

Yo estaba en un café. Recuerdo muy bien el día,Martes 18 de Marzo. Todos los martes concurría a ese mismo sitio. La rutina que venía acarreando desde hacía un año era tal, que al poco tiempo pude decirle al mozo José:"Lo de siempre". Otra de mis costumbres era sentarme en la misma mesa contra la pared de vidrio y pedir un café doble cargado.

Se dirigía hacia el norte. Desaceleró el paso, frenó por completo y compró el diario. Retrocedió cinco pasos y observó una vidriera. Era una librería. Entró y diez minutos después salió con una bolsa amarillenta. Dudó.

No podía dejar de observarlo. Él sin dudas buscaba a alguien o algo. O al menos yo lo percibía de esa manera. Los 50mts que nos separaban pueden ser la respuesta a cada vacilación; sobre colores y miradas.Ni marrón ni beige,la bolsa amarillenta,expresión de búsqueda,etc.

Encendió un cigarrillo y cruzó de vereda ignorando el semáforo. Logró evadir todos los vehículos. Parecía inmune a las bocinas de los desquiciados automovilistas. Se aproximaba al café. Había caminado en dirección contraria en dos ocasiones.Ahora parecía decidido. Entró.

Comenzé a imaginar posibles historias,posibles nombres,personalidades, y libros. Se sentó en la mesa contigua. Sacó los libros,leyó las contratapas de ambos.Divisé buenos títulos y autores. Pidió un café doble y un cenicero. Vi el primer cigarrillo apagado en el suelo. Comprendí sus penas. Necesitaba escuchar su voz. Me acerqué a pedirle fuego, no escuchó. Insistí y me alcanzó el encendedor.Aún no conocía su timbre. Le dije "Gracias" con fuerza. Y contestó un "De Nada" enérgico.

Ese 18 de Marzo fue memorable. El desconocido había quebrantado la monotonía en la que estaba inmersa.Al menos la del Martes. Afortunadamente,no lo vi de nuevo.